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Visita la sorprendente Cueva de las Calaveras

Si eres un apasionado de las cuevas y quieres vivir una aventura única, la Cueva de las Calaveras debe estar en tu lista de lugares para visitar. Ubicada en Benidoleig, Alicante, esta maravilla natural es un verdadero tesoro escondido de la naturaleza.

El nombre de la cueva se origina en la parte más superficial del recorrido, donde se pueden observar diferentes formaciones rocosas que imitan diferentes partes del cuerpo humano, como por ejemplo, cráneos. Pero no te preocupes, las formaciones rocosas no son restos humanos reales, son simplemente una peculiaridad que caracteriza esta maravillosa cueva.

Para empezar, debes saber que la cueva tiene una longitud de unos 400 metros y una profundidad de 50 metros. El recorrido de la cueva, que incluye múltiples galerías, formaciones rocosas y colores sorprendentes, puede durar de 45 minutos a una hora. El precio de la entrada es de unos 7€, un precio asequible para una experiencia inolvidable.

El recorrido por la cueva comienza con una pequeña caminata de unos 30 metros, para luego adentrarse en una ambiciosa galería. A medida que avanzas, la cueva te sorprenderá con formaciones rocosas sorprendentes, como estalactitas, estalagmitas y columnas.

Una de las galerías más llamativas es la Galería de los Espejos, que crea una sensación de profundidad debido al efecto de la luz y los reflejos. Esta galería también alberga una cascada de agua que, además de añadir un toque de frescura, se suma al encanto natural de la cueva.

Otra galería famosa es la Galería Sahara, llamada así por su tonalidad de color ocre. En esta galería, la naturaleza ha dejado su huella con paredes curiosamente aplanadas y una sensación casi desértica. Sin embargo, no te preocupes, la humedad es palpable en el ambiente.

Una vez que hayas pasado por todas las galerías, llegarás a la parte más profunda de la cueva, donde se encuentra una sorprendente laguna. Esta laguna, alimentada por una fuente subterránea, impresiona por su color turquesa y transparencia. En este punto de la visita, la cueva te regalará uno de los momentos más emocionantes y tranquilos de tu recorrido.

Después de salir de la cueva, es recomendable visitar el pequeño museo donde podrás conocer fragmentos de la historia y la geología de la cueva, además de poder contemplar una pequeña exposición de restos de animales extintos.

En resumen, la Cueva de las Calaveras es una joya natural que no puedes perderte. Recorrer sus galerías, admirar su belleza, sorprenderte con sus colores y formas, y contemplar su inquietante laguna son experiencias que se quedan grabadas para siempre en la memoria.

Por lo tanto, si estás pensando en visitar Alicante, no dudes en incluir en tu itinerario una visita a la Cueva de las Calaveras, una experiencia emocionante y enriquecedora que no te dejará indiferente. ¡No te arrepentirás!